PRÁCTICA 1. HERRAMIENTAS DIGITALES PARA LA DOCENCIA Y LA INVESTIGACIÓN

¿Qué herramientas digitales podemos utilizar en el aula? A continuación, hago una clasificación de diez herramientas, en función de sus características, que he usado en el aula de secundaria:

1. ProQuest, Scopus, WoS, Centro Virtual Cervantes y Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes: las cuatro primeras herramientas digitales son bases de datos a las que recurro para la preparación de los contenidos de la asignatura, ya que hay una amplia variedad de artículos, reseñas y capítulos de libros a los que puedo echar un vistazo para documentarme mejor y, por otra parte, la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes permite descargarse textos que pueden trabajarse en el aula de secundaria. El tiempo que le dedico a cada una de estas herramientas varía del curso y de la actividad que toque trabajar ese día en el aula, a saber: no es lo mismo preparar una exposición de veinte minutos sobre la literatura del Siglo de Oro para 3ºESO que preparar una serie de materiales para un 1º Bachillerato sobre las Coplas de Jorge Manrique. Por tanto, es cuestión de ajustarse a las necesidades del alumnado: en un 3ºESO se proporciona una visión general de la literatura, mientras que en un 1º Bachillerato se ofrece un análisis más detallado de las obras de determinados autores.

Estas herramientas las conozco desde que entré a la carrera, en particular, la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes. Las bases de datos como Proquest, Scopus y WoS empecé a utilizarlas cuando empecé a formarme como investigador, es decir, cuando realicé mi primer máster y, más tarde, cuando inicié el programa de doctorado.

2. Kahoot y Baamboozle: son dos juegos en línea con fines didácticos, pues proporcionan retroalimentación al alumnado, al tiempo que permiten realizar una autoevaluación. Si bien comparten el componente lúdico, el Kahoot se diferencia del Baamboozle en que esta herramienta digital siempre ofrece cuatro opciones de respuesta con una única respuesta correcta, lo que potencia que los alumnos que mejor han asimilado los contenidos logren una mayor puntuación en el juego. Ahora bien, el Baamboozle incluye preguntas de respuesta abierta, de verdadero o falso o cuatro opciones de respuesta; además, para jugar al Baamboozle, la persona ganadora no es aquella que sabe más, sino que es cuestión de suerte, ya que es una herramienta digital que permite ganar puntos extra o llegar al primer puesto sin necesidad de contestar bien a una pregunta, así como quitar puntos a otros grupos para incorporarlos en tu puntuación. El tiempo que le dedico a la preparación de los juegos es mayor con el Kahoot que con el Baamboozle, puesto que en el Kahoot debes pensar más opciones de respuesta. Así, estimo que como poco una hora he dedicado cuando he preparado un Kahoot de unas treinta preguntas.

El Kahoot lo conozco desde hace muchos años. Recuerdo que un profesor de secundaria era aficionado a este juego y, en aquellos tiempos en que nadie tenía teléfono, teníamos que bajar al laboratorio de idiomas para poder jugar. Con respecto al Baamboozle, lo conozco más recientemente, ya que la profesora de la academia de inglés a la que he asistido estos últimos años utiliza este juego para determinar que hemos asimilado los conceptos gramaticales.

3. Google Drive Moodle: son plataformas a través de las cuales comparto materiales con el alumnado. Además, ambas plataformas permiten la distribución de los materiales en carpetas diferenciadas. De hecho, Moodle es una plataforma de fácil acceso en la que se puede observar el número de veces en que el alumnado accede y se descarga los materiales. El tiempo que le dedico a compartir los materiales es mayor a principio de curso porque tengo que crear las distintas carpetas y organizar los materiales. Pero, una vez que ya está ordenado el Drive o el Moodle, compartir los materiales es cuestión de minutos.

El Google Drive lo conozco desde hace muchos años. De hecho, tuve una profesora de secundaria que, además de trabajar con el libro de texto, utilizaba Google Drive y compartía materiales extra a través de esta plataforma. Por su parte, el Moodle es una herramienta digital que conozco por mi incorporación al sistema universitario.

4. Microsoft Excel y jamovi: son dos herramientas a través de las cuales realizo un seguimiento de los/as alumnos/as, elaboro gráficos de sus notas y observo la curva de aprendizaje del grupo-clase. El tiempo que dedico al uso de estas herramientas digitales es aproximadamente a una hora, ya que cuando arrojo las notas en el programa también suelo aportar observaciones de los resultados obtenidos por cada alumno/a.

El Microsoft Excel es una herramienta del paquete Microsoft 365 que empecé a utilizar hace un par de años, pero que facilita en gran medida el establecimiento de las notas, porque el programa se encarga de hacer los cálculos de manera automática, siempre que el usuario se lo indique. Por su parte, el jamovi es un programa de análisis de datos que conozco desde la entrada a mi primer máster y que, además de permitir realizar investigaciones, es fácilmente incorporable en la educación en lo que se refiere al tema de la evaluación.

5. PowerPoint y Prezi: son dos herramientas digitales que utilizo para realizar presentaciones interactivas con objeto de explicar aspectos conceptuales. La creación de un PowerPoint y un Prezi implica muchas horas detrás, por lo que una persona que se incorpora a trabajar como profesor sustituto apenas tiene tiempo para elaborar ninguno, porque lo primordial es conocer al alumnado, saber qué contenidos están trabajando en ese momento del curso y coordinarse con el/la profesor/a que les había impartido clase.

Empecé a utilizar las dos herramientas digitales cuando empecé la etapa de secundaria. El primer PowerPoint (o bien uno de los primeros) que elaboré fue una presentación sobre quién era yo y cuáles eran mis hobbies.

6. Bluesky Instagram: son dos redes sociales que pueden ser utilizadas con fines didácticos. De hecho, en la carrera, tuve una asignatura en la que, junto con la profesora, creamos una cuenta de Instagram en la que elaborábamos posts sobre sociolingüística  para compartir con personas interesadas en el mundo de la lingüística. El tiempo que le dedico depende muchísimo de la cantidad de información y del número de entradas que haga en un día/semana. Pueden ser unos cinco minutos que estar una hora preparando un hilo para Bluesky.

Son herramientas que conozco desde hace muchos años, si bien Bluesky es una versión alternativa para enfrentar el monopolio y la difusión de contenido fascista que ejerce Elon Musk sobre las redes sociales.

7. Canva y Genially: son dos herramientas digitales que permiten el diseño de presentaciones interactivas, así como de infografías. Personalmente, no las uso como profesor, sino que invito (o, en algunos casos, obligo) a los estudiantes a que sean ellos quienes implementen estas herramientas para elaborar trabajos de clase. El tiempo de dedicación es muy elevado, por lo que solicitar una tarea a través de estas herramientas debe hacerse con bastante antelación para que los/as alumnos/as puedan organizarse y cumplir con el plazo de entrega establecido.

Son dos herramientas que conozco desde años atrás, cuando editaba imágenes para después compartirlas por otras redes sociales.

8. Google Meet, Cysco Web y Zoom: he utilizado estas plataformas de videoconferencia para recibir cursos e impartir clases de repaso. Este tipo de herramientas digitales son toda una alternativa cuando no se puede asistir de manera presencial al aula. De hecho, con el paso de los años, tanto la calidad del audio como de la imagen han mejorado muchísimo. Además, al tener una cuenta institucional, Google Meet y Zoom no establecen limitación de tiempo, por lo que pueden celebrarse sesiones de larga duración sin el inconveniente de tener que generar un nuevo enlace para asistir a la videoconferencia. El tiempo que le dedico a estas herramientas digitales varía del tiempo que requiera cada sesión.

Estas herramientas digitales las conozco, principalmente, por las consecuencias que trajo la pandemia COVID. Gracias al confinamiento, he conocido estas herramientas que me han permitido asistir a conferencias, al tiempo que he podido impartir clases virtuales.

9. YouTube Spotify: estas dos herramientas digitales pueden utilizarse como estrategias didácticas para acercar a los estudiantes a la poesía. Enseñar poesía a los jóvenes adolescentes no es tarea fácil. Por este motivo, la música es una herramienta clave, ya que los estudiantes tienen como principal fuente de ocio la música, por lo que establecer la relación entre las letras musicales y los textos líricos favorece la comprensión del mensaje poético. Así, recurrir a la música para trabajar el lenguaje poético es una forma de aproximar al alumnado a dos expresiones artísticas al mismo tiempo. Por tanto, se pueden proponer canciones y analizar su métrica y rima como si se trataran de poemas y, a su vez, se pueden crear listas de reproducción en que se combinen poemas recitados por cantantes actuales y canciones recientes de otros artistas. Estas herramientas digitales, además, permiten el uso de subtítulos para que los alumnos puedan seguir la letra de las canciones. El tiempo que le dedico es el de la actividad pensada para la sesión de clase. YouTube y Spotify son dos plataformas de fácil acceso, por lo que no se requiere una instalación previa ni nada por el estilo.

Estas aplicaciones las conozco desde hace muchos años. No recuerdo la edad concreta, pero todavía iba al colegio cuando se lanzó YouTube como plataforma para que los artistas compartieran los vídeos musicales de sus nuevos sencillos.

10. Gmail, Outlook, Ítaca Web Familia: son herramientas digitales a las que pueden recurrir alumnado y familiares para comunicarse con los/las profesores/as. De hecho, el Gmail permite redireccionar los mensajes a una otra dirección de correo electrónico, de manera que siempre se pueda proporcionar una respuesta al mensaje recibido. Así, no se quedan dudas sin resolver ni reuniones a las que asistir, por ejemplo. La contestación de mensajes requiere más tiempo del que se cree. Estimo que una persona puede dedicar aproximadamente una hora diaria a contestar mensajes del correo y escribir una respuesta.

El Gmail y el Outlook los conozco desde hace muchos años, pero el Ítaca y la Web Familia son herramientas digitales recientes de la Generalitat, por lo que no controlo igual de bien su uso en comparación con los servicios de mensajería tradicionales.

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